lunes, 2 de abril de 2012

Autodeterminación


Supongamos que un buen día decido tomar posesión de la Trafalgar Square, la tradicional plaza ubicada en pleno centro londinense. Mediante un ingenioso sistema de empalizadas, comandos y francotiradores especiales, expulso a la gente que pasea por el lugar y procedo a ocuparlo en pocos minutos.
Tras la sorpresa inicial, los vecinos deciden llamar a la policía, que es repelida apenas llega. A cada instante, mi posición se fortalece.
La noticia de que un grupo comando acaba de tomar la Trafalgar Square no tarda en esparcirse. Cuando llega la televisión, decido emitir un comunicado público: “Señores, hemos tomado el control de la Trafalgar Square. Somos descendientes de los antiguos habitantes de la región, que vivían aquí antes que los anglos o los sajones. Por consiguiente, el lugar nos pertenece”.
El Gobierno –incrédulo-, envía al Ejército para acabar con el delirio. Pero una vez más repelemos cualquier agresión, y hasta dejamos varios soldados británicos heridos.
La noticia ya se vuelve internacional y el mundo contempla asombrado el nuevo conflicto. El Gobierno local envía negociadores para solucionar el caso. La ONU exige el diálogo para evitar más derramamiento de sangre.
Nadie puede desalojarnos de la Trafalgar Square.
Pasan años.
Pasan 179 años.
Y seguimos allí.
Los hijos de mis hijos y sus hijos reclaman la “autodeterminación” del pueblo “libre y soberano” de Trafalgar Square.
¿Qué pensarían los ciudadanos ingleses acerca de ese reclamo? ¿Qué diría el Foreign Office sobre esta presunta autodeterminación? ¿Y qué los kelpers?

A los que cayeron.
A los que volvieron.

2 comentarios:

Viviana Giménez dijo...

Los argentinos tenemos menos derechos sobre esas islas (llámenlas como más les guste) que los mapuches, wichís, tobas, sobre estos territorios llamados "argentinos". Sigue pareciéndome ridículo que se quiera basar los derechos de la Argentina en acontecimientos históricos de épocas en que el mundo todavía se echaba a suerte o azar. ¿Tiene los argentinos, hijos de españoles, italianos, polacos, rusos, más derechos sobre el territorio argentino que, por ejemplo, los mapuches?
Los llamados "kelpers" nacieron y crecieron en esa tierra que habitan, como así lo hicieron sus abuelos y bisabuelos (más de lo que puedo decir sobre mi propia familia y este suelo que habito). Viven en un mundo casi perfecto: trabajo, casa, educación y salud garantizados. ¿Por qué diablos querrían ser argentinos? ¿Para convertirse en piquteros?
Lo que no puedo sino lamentar, con mucho dolor, es que hayan sido enviados tantos jóvenes argentinos al matadero para defender...un par de rocas. Adonde nadie de aquí se iría a vivir. ¿Cuantos se mudan, de hecho, a la Patagonia, que está prácticamente deshabitada? ¿Para qué alguien quiere esas islas?
Ah, sí, claro: el petróleo...No le envidio el destino a ningún país que encontró petróleo bajo su tierra...

aristideseljusto dijo...

Es cierta la hipocresía sobre nuestra historia y la miseria de la guerra. Sin embargo, por algo Inglaterra no quiere discutir la soberanía: porque el derecho internacional -que arranca desde la modernidad-, nos daría la razón. No hay cosa que les haya beneficiado más a los kelper que la propia guerra. Es importante oír su opinión (tienen sus razones para odiarnos), pero pedir la autodeterminación es un chiste. Es un tema complejo, realmente.

Besos!!